Sonora

La economía del Río Sonora

El pasado 7 de agosto fueron derramados 40 millones de litros de ácido sulfúrico en los ríos Bacanuchi y Sonora provenientes la Mina Buenavista del Cobre, afectando a poblaciones de la cuenca; el caso es catalogado como el desastre ambiental más grande del sector minero en la historia del país 1.

Los municipios afectados por la contingencia ambiental son Aconchi, Arizpe, Banámichi, Baviácora, Huépac, San Felipe de Jesús y Ures, con localidades que dependen de las aguas del Río Sonoras para el consumo humano y el desarrollo de actividades económicas, alrededor de 20 mil personas se encuentran en emergencia. Contextualizar los costos económicos del derrame se torna difícil dado que no hay una medición agregada oficial de las economías municipales; INEGI sólo publica el Producto Interno Bruto (PIB) a nivel Estatal con varios años de desfase. Sin embargo, existen metodologías para lograr acercamientos a la realidad económica de los municipios.

Para el presente texto se toma la metodología desarrollada por el Instituto de Información e Investigación Geográfica, Estadística y Catastral del Estado de México (IGECEM) para el cálculo del PIB de los municipios. Así, se tomaron de base los resultados del cuestionario ampliado del Censo de Población y Vivienda 2010, y el PIB del Estado de Sonora desagregado por sectores de actividad económica para el año 2010 para calcular el PIB de los municipios afectados por la contingencia 2. A continuación algunos resultados relevantes:

El PIB agregado de los municipios del Río Sonora en el año 2010 fue de 2,128 millones de pesos, 0.64% del total de la producción estatal; es decir de cada peso producido en el Estado, casi un centavo fue generado en estos municipios. Las actividades económicas de los municipios del Río dieron empleo a 10,901 sonorenses (1.07% de la población ocupada de la entidad). El PIB per cápita de la región era de 98.4 mil pesos, 26.5 mil pesos menor al del Estado (124.9 mil pesos)

La economía más importante de los 7 municipios es la de Ures, contribuyendo por si sola al 0.27% del Producto Interno Bruto Estatal, en cambio la de San Felipe de Jesús sólo aporta 0.01% al agregado estatal.

En cuanto a la estructura sectorial, las actividades terciarias , referentes a  comercio, turismo, entre otros 3, son las que más contribuyen al valor de la producción con 40% del PIB total de los 7 municipios, empleando a 4,701 personas (44% de total).

Le sigue el  sector secundario, actividades referentes a minería, industria, entre otros 4, con 33% del valor generado, empleando a 2,647 personas (24% de total).

Contrario a lo que pudiera pensarse, el sector primario, referente principalmente a actividades agropecuarias 5, es el sector que menos aporta al PIB agregado, 26% del valor producido; sin emargo, es el segundo sector que más genera empleo en los municipios con 3,451 personas ocupadas (32% del total). Cabe mencionar que la importancia de estas actividades en en el Río Sonora radica en que ahí se produce el 2.23% del total de la producción estatal del sector.

Cabe señalar que la estructura de los municipios del Río Sonora es muy distinta de la del PIB estatal. A nivel Estado, el sector primario apenas aportó el 7.7% al valor de la producción ese año, mientras el secundario lo hizo con 36.6% y el terciario con 56 por ciento. Como se puede observar, a pesar de que el sector primario en la región es el que menos aporta a su PIB, estas actividades tienen un mayor peso que en el resto del Estado.

LA MINERÍA EN SONORA

Si se toma el total del PIB Estatal para el año 2012, las actividades mineras representaron 15.3% del total, representando un valor total de la producción de 68,192 millones de pesos. Si se toma en cuenta el fideicomiso de apoyo anunciado hace unas semanas, los 2 mil millones de pesos aportados por Grupo México 6 representan casi 3% de la producción minera de Sonora en un año.

CONCLUSIÓN

La información anterior debe ampliarse y tomarse en cuenta para tomar decisiones de política pública encaminadas a dar solución a la contingencia actual del Río Sonora y buscar a futuro tener una regulación más férrea hacia las actividades extractivas, que por naturaleza son nocivas hacia el medio ambiente, ya que son personas que distan de beneficiarse las que salen afectadas directa como indirectamente; además, proponer impuestos enfocados a cubrir los costos ambientales en que incurren estas industrias tomando en cuenta un mayor beneficio y desarrollo integral para los municipios que las hospedan.

Mapa Interactivo

(Dar click en el municipio de interés para información detallada a 2010)

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Economía mexicana

Los fallos de Hacienda

Hace unos días causó revuelo el recorte de 1 punto porcentual a la meta de crecimiento del PIB para 2015 (de 4.7 a 3.7%)1, publicada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) en el documento Criterios Generales de Política Económica2, respecto a los pre-criterios publicados en marzo pasado.

No pocos criticaron y vieron en ella una falta de fe gubernamental hacia los efectos de las reformas culminadas en el trimestre pasado. Según se ve en el siguiente gráfico3, no habría que sorprender que SHCP erre y modifique sus pronósticos, típicamente calcula a la alza la meta sólo para verse opacada por la realidad y modificada a la baja, tal como ha pasado en el presente año.

En 9 de los últimos 15 años se sobreestimó el crecimiento del PIB en los CGPE, el error promedio fue de 1.1 puntos arriba, o 1.96 puntos porcentuales si no se toma en cuenta la dirección4. Salvo en 2002, el pronóstico se situó entre 3 y 4.5 por ciento.

Hay consecuencias presupuestales al no calcular el indicador de manera correcta, éste sirve como referencia en los ingresos y gastos del Gobierno Federal; sobreestimar el crecimiento lleva a un presupuesto desequilibrado.

Destaca el  año 2009 donde la SHCP erró en 7.7 puntos porcentuales entre la previsión de crecimiento y la realidad, el más grande durante el periodo. El paquete económico para 2009, incluídos los CGPE, fue públicado previo a la crisis financiera internacional por lo que los pronósticos no estaban tomando la nueva realidad.

En el otro expectro se tiene el año 2011, una vez superada la crisis, se tuvo el menor error con 0.2 puntos, y el pronóstico fue superado por la realidad. Todo un logro para los futurólogos de Hacienda.

Es fácil ver en los pronósticos de SHCP  una promesa de campaña donde al no cumplirse debe ser reclamada, parte de culpa la tiene el mismo Gobierno Federal al utilizar los pronósticos de crecimiento como punta de lanza para aprobar las reformas, lo que lleva a diagnósticos errados y por consiguiente pronósticos fuera de la realidad.

El terreno de las predicciones siempre estará plagado de errores, y es importante que se modifiquen antes de tomar decisiones. El porqué sistemáticamente están errados es algo que se debe evaluar con seriedad.

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